- El servicio de atención telefónica lo venía realizando hasta la fecha un Centro Especial de Empleo mediante subcontratación y empleaba a casi un centenar de trabajadores con discapacidad que ahora ven peligrar sus puestos de trabajos por una nueva contrata.
Madrid, 3 de agosto de 2018. El Consejo Español para la Defensa de las personas con Discapacidad y/o con Dependencia (CEDDD) muestra su gran preocupación por el centenar de teleoperadores subcontratados desde hace tres años por la Agencia Tributaria para prestar el servicio de cita previa telefónica los cuales han iniciado una campaña de movilizaciones y paros en protesta por su inminente despido tras la adjudicación del servicio a una nueva empresa.
La gravedad de la situación de estos trabajadores con discapacidad es debida a que la empresa Konecta, nueva adjudicataria del servicio, no quiere subrogar con las condiciones laborales y los derechos de dichos trabajadores pese a que la Ley de Contratos del Sector Público (LCSP) obliga claramente a ello. Una situación que «conoce la Agencia Tributaria», según Sergio Pascual, representante del sindicato mayoritario UTCEE.
El artículo 130 de la LCSP establece la indudable obligación de Konecta de subrogar a los trabajadores al establecer dicha norma que: “cuando la empresa que viniese efectuando la prestación objeto del contrato a adjudicar fuese un Centro Especial de Empleo, la empresa que resulte adjudicataria tendrá la obligación de subrogarse como empleador de todas las personas con discapacidad que vinieran desarrollando su actividad en la ejecución del referido contrato”. Con su actuación, tanto la AEAT como Konecta, están haciendo caso omiso de la Ley la cual garantiza sin lugar dudas la conservación del puesto de trabajo a las personas con discapacidad que prestan servicio en un CEE como es el caso.
Sin embargo, amparándose de forma maquiavélica en el convenio del sector de Call Center, Konecta solo ha ofrecido a los empleados «incorporarse al proceso de selección actualmente abierto». No solo se produce la grave amenaza de pérdida de empleo sino que además, Konecta ha comunicado a los trabajadores con discapacidad que viven y trabajaban en Madrid que el servicio se va a realizar en Sevilla. Un hecho intolerable carente de toda sensibilidad hacia las personas con discapacidad y cuya única finalidad es garantizarse en su caso la renuncia de los trabajadores por sus limitaciones de movilidad; todo ello con la anuencia de la AEAT.
Los trabajadores afectados y la AEAT en reunión celebrada el día 2 de agosto, se han dado un plazo de 20 días al objeto que la AEAT cumpla con sus obligaciones e inste a Konecta como adjudicataria a subrogar a los trabajadores por mandato de la norma legal. No obstante, los teleoperadores no se van a detener y van a seguir movilizándose cada semana para seguir luchando por sus derechos laborales puesto que ante esta grave situación no hay otra respuesta que el obligado cumplimiento de la Ley.
Desde el CEDDD queremos reivindicar el derecho de estas personas y confiamos en que la AEAT haga cumplir a la empresa adjudicataria con la normativa y a subrogar a todos los trabajadores con discapacidad.