«El estado de preocupación es generalizado y eso es normal, pero trabajamos para que los residentes noten lo menos posible la ausencia de sus familiares»

Jaime Gutiérrez, representante del Grupo de Trabajo de Psicología del Envejecimiento del Consejo General de la Psicología, trabajando en una residencia de personas mayores en Valladolid, ha tenido la gentileza de compartir con nosotros esta conversación en relación al Coronavirus y la población a la que atiende como psicólogo sanitario.

  • Las autoridades y expertos instan a la calma ante la epidemia por el nuevo coronavirus, ¿qué recomendaciones tenéis desde la psicología para afrontar esta situación?

Desde la Psicología se están poniendo a disposición de la población un conjunto de recomendaciones para casos como este en diferentes entornos como puede ser la familia en general, con menores y adolescentes, pero también en los casos en los que las personas viven solas o están aisladas.

Estas pautas están orientadas a una mejor disposición emocional de los individuos frente a una situación excepcional que la mayoría de las personas de nuestro país no había experimentado nunca.

  • Sabemos que también trabajas en una residencia de mayores, ¿cómo están siendo estos días?

Tengo la suerte de trabajar en una de las residencias que tomó medidas muy pronto, en el sentido que fue la primera en restringir las visitas, registrando las entradas del exterior y dotando a los familiares de mascarillas en dichas visitas.

También dotó a todos los trabajadores de material preventivo de uso obligatorio antes de que fuera decretado como obligatorio.

Por último, ha restringido los servicios a los estrictamente necesarios para evitar las entradas del exterior y así prevenir el contagio.

  • ¿Cuáles son las reacciones psicológicas más comunes ante un caso como este, que además ha provocado que se declare el Estado de Alarma?

Va a depender de muchos factores, desde el ambiente familiar previo, hasta los recursos a disposición de las personas, pasando por su propia creatividad para una situación como esta.

Cada persona va a reaccionar de una manera diferente, pero el factor social también influye, es decir, comprobar que toda la población está en la misma sintonía, con los mismos problemas y respondiendo de una forma muy similar ayuda al control del comportamiento individual.

  • ¿La vía telefónica o telemática está sirviendo de apoyo a los familiares que no pueden visitar a vuestros residentes?

Todos los medios a nuestra disposición puede ser útiles, pero hemos de tener cuidado, de manera que se han de seguir manteniendo unos requisitos de confidencialidad y protección de la intimidad de los usuarios.

Desde el Colegio Oficial de Psicología de Castilla y León hemos puesto a disposición de los colegiados una plataforma que encripta las videollamadas y que asegura que detrás de la consulta existe un profesional y esto es importante ya que estamos observando un auge importante en redes de pseudoprofesionales e incluso de personas sin ninguna competencia en Psicología que ofrece servicios, cuando menos sospechosos y sin garantía ninguna.

  • ¿Cómo se encuentran los mayores? ¿Y los profesionales?

El estado de preocupación es generalizado y eso es normal, pero trabajamos para que los residentes noten lo menos posible la ausencia de sus familiares.

La mayoría de ellos comprende además que se trata de una población de riesgo y comprende que lo que se está haciendo es por su bien y esto influye en su estado de ánimo.

Es cierto que la carga de trabajo de los trabajadores es mayor, pero también comprenden que la situación lo requiere y se están adaptando bien.

  • ¿Qué recomendaciones tenéis los y las psicólogas para afrontar estos días de aislamiento y encierro en los hogares?

Son muchas, aunque personalmente considero que una de las más importantes es la organización temporal de este periodo. Es recomendable que nos hagamos un horario de actividades en el que tiene que haber de todo, desde tiempo para el ocio hasta actividades productivas positivas.

Es importante no descuidar la higiene, la imagen personal, el ejercicio físico (en este caso adaptado a las condiciones de nuestro hogar, pero no conozco ninguna casa que no ofrezca un espacio suficiente para hacer unas sentadillas, unas flexiones o unas abdominales)

Además, es conveniente ponerse a hacer aquello para lo que no encontrábamos nunca tiempo… llamar a aquellos amigos que se fueron a vivir fuera o leer aquel libro que no llegamos a abrir son tareas a nuestro alcance.

  • ¿Debemos alejarnos de la televisión o las redes sociales para evitar la saturación de información catastrofista?

Debemos seleccionar las fuentes de información que recibimos, y atender solo a las más fiables. No vale todo, ni es conveniente estar demasiado tiempo recibiendo información negativa, de manera que es mejor elegir el noticiario de nuestra cadena favorita y no pasar de un canal a otro de información buscando novedades que no existen, es una realidad para todos, solo cambiará la perspectiva, pero no muchas fuentes nos van a dar muchas realidades.

  • Y por último y en clave personal, ¿cómo te sientes? ¿Cómo te cuidas?

Personalmente y por mi responsabilidad me está tocando trabajar mucho, aunque desde casa, por lo que no me ha dado tiempo aun a aburrirme, más bien al contrario.

También tengo una madre de 89 años a la que ahora cuidamos entre los hermanos que requiere de más atención por nuestra parte y que eso ha venido a aumentar mi actividad personal.

He hecho una lista de tareas pendientes en mi casa y aun no me ha dado tiempo a penas a comenzar a ponerme a ello, pero soy consciente que en este proceso llegará el momento en el que pueda realizarlas, y por último, he comenzado a organizar mis lecturas pendientes y ahora estoy con un libro de Aramburu que me tiene enganchado.

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