• El CEDDD celebró la III jornada del sectorial de mayores y dependencia con un amplísimo aforo expectante a las exposiciones de los expertos.
• “Tres modelos de vida para las personas mayores” nos mostró tres realidades que van cambiando para adaptarse a las demandas de los mayores de hoy y del futuro.
Madrid, 24 de febrero de 2021. El Consejo Español para la Defensa de la Discapacidad y la Dependencia (CEDDD) celebró ayer con más de 150 asistentes la III Jornada del Sectorial Mayores y Dependencia en el que se presentaron tres formatos de vida para los mayores de hoy y los del futuro. El encuentro tuvo formato online y accesible en lenguaje de signos para personas con discapacidad auditiva.
La jornada empezó con la bienvenida de D. Albert Campabadal, presidente del CEDDD dando paso a la Adjunta a Presidencia del CEDDD, Dña. Mar Ugarte, quién ejerció de moderadora de la jornada. Intervinieron expertos en la materia: D. Diego Juez, Director Territorial Vitalia Home, presidente de ACALERTE así como secretario del Círculo Empresarial de Atención a las Personas (CEAPs); Dña. Cristina Cuesta, Fundadora y CEO de la Asociación Nacional de Cohousing Spain; D. Javier Benavente fundador y presidente de Grupo Alares y fundación Alares y D. Bartolomé Escandell, presidente de la Asociación de jubilados españoles (AJUBE).
Diego Juez, trasladó el objetivo de visibilizar a las personas mayores en el ámbito residencial. La esperanza de vida crece exponencialmente y requiere que la sociedad se ocupe del envejecimiento y lo vea como una oportunidad. Reclamó más presencia del sector, señalando los problemas de las personas mayores en la España vaciada y apuntó las ventajas en empleo estable de las residencias. Asimismo, destacó que los mayores no son un gasto sino una inversión para todos. Las residencias de hoy se centran en la persona y las familias son partícipes y colaborativas en la vida de sus familiares en las residencias. Desde CEAPs siguen trabajando por evolucionar a otros modelos de atención siendo la residencia el hogar de las personas mayores y centros cada vez más personalizados.
Por su parte, Cristina Cuesta presentó el modelo Cohousing, sus orígenes, implantación y características destacables por su novedad y escaso conocimiento en el mercado español. Un modelo que las Administraciones van incluyendo paulatinamente en los servicios públicos como respuesta a los cambios de paradigma que producen cambios en la demanda social de nuevas maneras de atención a las personas mayores o de otra forma de vivir. Los perfiles de hoy, no son los de ayer y las personas de hoy quieren decidir cómo ser cuidados con autonomía, salud y en un entorno seguro. Las personas mayores no quiere ser una carga para las familias ni quiere vivir solas, así este nuevo modelo basado en la vivienda colaborativa viene a responder a esas nuevas demandas.
En tercer lugar, Javier Benavente, quien de una forma muy clara apuntó la voluntad de las personas mayores de permanecer en su entorno y puntualizó la necesidad de respetar el derecho a elegir que las personas puedan vivir y disfrutar hasta el final de sus días, adaptándolo a sus necesidades y preservando su felicidad dándoles la oportunidad de tener capacidad de elección. En ese sentido el objetivo de Alares es la prestación de servicios domiciliarios que cualquier persona, incluido los mayores, precisan y adaptado a las necesidades de cada perfil y con diferentes programas. También hizo hincapié en la necesidad de la colaboración público-privada para poder hacer posible a las personas mayores esa capacidad de elección. En este escenario, propuso una Ley de Servicios a la Persona para que las personas puedan utilizar la prestación vinculada al servicio de forma libre y elegir con los requisitos adecuados el tipo de servicio adecuado para cuidarle en su casa el tiempo necesario. Habría que tener en cuenta la situación precaria de los trabajadores en este sector y la necesidad de oficializar su formación y regular su trabajo.
Finalmente intervino Bartolomé Escandell, como la voz en primera persona de los mayores y relató la necesidad de asociarse. Presentó distintos parámetros totales de población de personas mayores, nivel en salud, situación económica y relaciones sociales que influyen directamente en su formato de vida. Y es que, las relaciones sociales son muy importantes para las personas mayores y actualmente la soledad está incidiendo en un amplio porcentaje de esta población. Por todo ello los gobiernos deben trabajar en este sector que se duplicará en apenas 30 años. Asimismo destacó la importancia de las condiciones de vida de las personas mayores dependiendo del estado de salud (especialmente los perfiles crónicos que están más limitados para desarrollar una vida sin obstáculos) e incidió en los niveles bajos de las pensiones, lo que limita y condiciona el acceso al ocio, a poder elegir su forma de vivir, sus entornos o los servicios que necesitan.
Contestaron los ponentes a distintas preguntas de los asistentes y cerró la jornada, Albert Campabadal, presidente del CEDDD precisando que el centro de todos los servicios y todos los esfuerzos es y debe ser la persona. Todas las entidades de CEDDD trabajan por la discapacidad, por la dependencia y por los mayores independientemente de su formato jurídico siempre alineados con los valores de CEDDD, los cuales se han visto reflejados en los ponentes: capacidad de elección, prestación vinculada en los servicios que desee el mayor, cohabitación de lo privado y lo público, más inversión en las personas mayores, discapacidad y dependencia. Concluyó con el mensaje de que los servicios a las personas estén reglados y profesionalizados y que los impuestos afectos a estos servicios se adapten al sector.
Una vez más, el Consejo Sectorial CEDDD de Mayores y Dependencia cumplió su objetivo de esta jornada: compartir y generar conocimiento para exponer los distintos modelos de vida que actualmente hay para las personas mayores, perspectiva sobre una de las cuestiones más complejas que ha de afrontar la sociedad actualmente y en el futuro. En el año 2050, la población de personas mayores se duplicará, teniendo hoy una esperanza de vida las personas mayores de 60 años de 25 años más de media. Los retos para estos mayores del futuro cuyo origen nada tiene que ver con los actuales ni en estado de salud, ni en el ámbito familiar, ni social ni incluso económico son muy importantes para una sociedad que quiera estar basada en el bienestar.